Las decisiones que toman lugar a la hora de contratar a un candidato no son tarea sencilla. La toma de decisiones inicia desde el momento que se define el perfil, los criterios de selección y la definición de la estrategia de búsqueda, sin embargo, el punto cumbre para la toma de decisiones es la selección de personal.
La toma de decisiones no es nada sencillo, y nadie dice que tenga que serlo, sin embargo, conocer una mejor forma de actuar es fundamento para tomar decisiones más críticas y con mayor fundamento. En esta entrada de blog te explicaremos como puede mejorar tu toma de decisiones para que elijas con seguridad al mejor candidato.
¿Qué es la toma de decisiones?
Se puede definir como una capacidad que se desarrolla a partir de la observación y el análisis de diferentes alternativas que se nos presentan y que nos permite, de manera lógica y documentada, decidir entre una de esas alternativas con el fin de conseguir el beneficio más oportuno.
Es importante reconocer que esta capacidad se puede entrenar, de forma que, si consideras que no eres buena o bueno en la toma de decisiones, ¡No te preocupes! Puedes mejorar considerablemente con la práctica adecuada, de tal forma que te vuelvas un experto en análisis y así tomes las decisiones adecuadas para que tu proceso de selección pueda ser llevado a cabo de una manera más estratégica.
¿Cómo mejorar la toma de decisiones?
Es importante que a la hora de tomar decisiones pensemos en hacerlo de una forma crítica, es decir, que utilicemos el razonamiento de una manera eficaz para generar soluciones eficaces.
Tener un buen criterio a la hora de tomar decisiones nos garantiza seguridad sobre las alternativas que elegimos. En un proceso de reclutamiento y selección, es difícil decidir por un buen candidato, siempre existe la incertidumbre, las preguntas surgen en la cabeza: ¿Y si resulta no estar tan preparado? ¿Qué tal si paso algo por alto? Sí, lo entendemos, es complicado quitarse esas preguntas de encima, pero aún con ello, tomar decisiones acertadas es posible, reduciendo la incertidumbre mediante el conocimiento.
Un buen tomador de decisiones cuenta con ciertas características especiales, las cuales son:
- Sus decisiones se basan en un análisis racional de opciones y alternativas: no toman decisiones a la ligera, antes de decidir evalúan el panorama al completo, por lo que, si surge una alternativa, por más buena que sea, siempre debe de contraponerse a otras alternativas que pueden ser igual de buenas e igual de validas.
- Toma decisiones oportunamente: de las alternativas existentes, ¿cómo se elige la mejor? Los tomadores de decisiones deben de definir lo que entienden por “lo mejor”, es decir, lo mejor puede ser lo que traiga un mayor beneficio a la organización, pero el beneficio puede reflejarse de distintas maneras. Un candidato puede que aporte valor de forma económica, otro puede hacer que un proceso sea mejorado, aportando a la productividad o la cultura de trabajo. Sin embargo, hay una sola vacante, ¿A quién convendrá contratar?
- Sus decisiones son apegadas a las políticas y normas de la empresa: ojo, cuando se toman decisiones no solo se depende del criterio del tomador de decisiones, pues debemos recordar que se trabaja en conjunto en una organización que cuenta con sus propios valores y políticas, los cuales deben de acoplarse a la decisión que se tome para no estar en contra de la cultura organizacional.
- El resultado de sus decisiones agregan valor a la organización: no importa cuál sea la alternativa que se elija, el buen tomador de decisiones sabe que su elección va a sumar en la empresa, no a restar. Tenerlo presente es importante para descartar todas aquellas alternativas que parezcan no ser ideales.
- Documenta apropiadamente los elementos en torno a sus decisiones a manera de respaldo: ¿Qué respalda una toma de decisiones? La respuesta es la información que respalda la decisión. No basta con buscar información, procurar anotar todos aquellos datos que son relevantes en la toma de decisiones es demasiado importante. Un tomador de decisiones sabe que la información escapa de su cabeza, pero no del papel, todo lo que este documentado y a la vista nos permite ver de forma más clara la información que tenemos disponible.
Ahora que hemos visto la importancia de tomar decisiones adecuadamente y además hablamos de lo que caracteriza a un buen tomador de decisiones, ¿Te sientes listo para comenzar a cambiar la manera en que desarrollas tu toma de decisiones? Tanto si te sientes preparado como si no, recuerda lo que decíamos antes, la toma de decisiones se entrena, nadie nace siendo bueno en ello, pero desarrollar esta capacidad requiere practica y unos cuantos errores, aprender de las decisiones que tomamos nos ayuda a crecer.