El feedback (o retroalimentación) es una forma de hacerle saber a tus colaboradores cuál ha sido el desempeño de sus esfuerzos en el cumplimiento de una meta.
No a todos les es fácil realizar un feedback efectivo, sobre todo cuando se aborda una situación problemática, por lo que en esta entrada de blog te ayudaremos a mejorar la forma en cómo realizas un feedback y lo haremos con un ejemplo muy interesante: ¡Hamburguesas!
El objetivo de hacer feedback
¿Por qué debería preocuparnos el hacer feedback? Hay muchas razones para ello, sin embargo, el principal objetivo es que a través de él se puede estimular el desarrollo profesional de los colaboradores.
Mediante el feedback podemos reconocer y felicitar el trabajo bien hecho, así como también corregir un comportamiento errático y alinear a tus colaboradores rumbo a una estrategia y mejores prácticas, también permite desarrollar en mayor medida la comunicación entre colaboradores, lideres y equipos.
Si el feedback va enfocado a reconocer un buen desempeño, la motivación del equipo o colaborador se ve aumentada; si va enfocado a corregir una acción, ayudará a reconocer los errores y mejorar así cualquier cuestión.
Algunos consejos previos para hacer feedback
Antes de pasar al plato fuerte, donde conocerás una buena forma de realizar el feedback, nos interesa dejar unas cuantas consideraciones para que sea más efectivo:
- Frecuencia: ten en cuenta que lo ideal es realizar de manera constante el feedback, aun cuando sea de pocos minutos. Debe de verse como algo natural en la empresa y que pasa continuamente.
- Se oportuno: trata de dar el feedback lo antes posible, ayudarás al colaborador a entender mejor las razones de sus aciertos y errores, además es mejor retroalimentar cuando no todo
- Sé profesional: adoptar una postura profesional es indispensable a la hora de hacer feedback, así como cuando se está recibiendo uno. El temperamento es tu mejor aliado, la calma tu mejor herramienta, recuerda que el objetivo del feedback no es solo criticar o liberar emociones, sino que a partir de la crítica se debe construir un camino hacia una mejora en el desempeño.
- Ataca el problema, no a la persona: uno de los mayores deslices que pueden suceder a la hora de realizar feedback es hacer un ataque personal que remarca los errores y termina por desmotivar al colaborador. Recuerda que no se trata de criticar a la persona, sino a las acciones que realiza y que afectan el desempeño laboral.
- Sé especifico: los detalles son importantes, entre más detalles puedas proporcionar sobre la situación sobre la que se está hablando, más entendible se vuelve el mensaje que se quiere dejar.
- Escucha al colaborador: no solo te límites a realizar comentarios sin dejar hablar a la otra parte, en el feedback también es importante estar atento a lo que el otro tiene que decir, muéstrate comprensivo y mantén una postura abierta para llegar a acuerdos.
Cómo hacemos un buen feedback (con una hamburguesa)
Cuando preparamos una hamburguesa nos tomamos el tiempo para prepararla y procuramos hacerlo de la mejor manera, teniendo los ingredientes a la mano y cocinándolos adecuadamente.
Una hamburguesa se compone de varias capas: el pan, la carne, el queso y la lechuga. Cada capa aporta sabor a nuestra hamburguesa y solo cuando está completa podemos disfrutar cada bocado. De acuerdo, expliquemos esta analogía.
De la misma manera que cuidamos los detalles al cocinar una hamburguesa, debemos de cuidar los detalles al realizar un feedback. Consideremos que cada capa de la hamburguesa va aportando una parte esencial al feedback:
Tapa inferior de pan
Se trata de encontrar un buen momento y un buen lugar para hacer el feedback. Una vez que hemos encontrado el momento adecuado, podemos abordar al colaborador, procurando hacerlo con prudencia y enfocados en saber hacia dónde queremos llegar. Es importante comenzar dando un poco de contexto sobre la situación, sin olvidarnos de mantener la comodidad y privacidad por parte del colaborador para facilitar que se muestre receptivo ante el feedback.
Carne
La carne es el ingrediente fundamental de la hamburguesa, de la misma manera, en el feedback, la carne debe de ser el momento para exponer de manera clara y a detalle los hechos y los datos por los que se está realizando el feedback. Es el espacio donde debemos ser certeros al mencionar el problema que está sucediendo o la situación que debe de ser resuelta.
Queso
Pero no todo se trata de mencionar situaciones problemáticas o afectaciones en el desempeño laboral y es por eso que también vale la pena mencionar los aciertos del colaborador, es importante decir algo agradable para amenizar la situación, recordarle al colaborador que también ha desarrollado destrezas que son dignas de exaltación.
Lechuga
Y así como a una hamburguesa le viene bien la lechuga como complemento, también en el feedback viene bien el escuchar al colaborador. Una vez que nosotros hemos dicho lo que teníamos que decir, es momento de dejar hablar a la otra parte y prestar oídos a lo que tiene que decir, así como mostrarse comprensivos, tal como lo mencionamos en el apartado de los consejos previos.
Tapa superior de pan
Finalmente, una hamburguesa no está completa sin la tapa superior de pan, o lo que es lo mismo, el feedback solo está completo cuando, habiendo expuesto ambas partes lo que tenían que decir sobre la situación, se trabaja en conjunto para llegar a posibles soluciones, planteando acuerdos en los que haya compromiso mutuo. Lo mejor es terminar con un comentario agradable que incite al colaborador a la motivación.
Conclusión
Una hamburguesa bien cocinada se disfruta, de la misma manera, un feedback bien realizado tiene consecuencias positivas tanto para el colaborador como para toda la organización. Esperamos que tras esta entrada de blog puedas mejorar la forma en como abordas a tus colaboradores a la hora de realizar un feedback.
Un último consejo sería reconocer que los colaboradores son humanos y como tales, tienen tanto aciertos como errores, unos son de admirar y otros se pueden corregir, lo importante es no olvidar la existencia de ambos.